LA FUENTE DE LA JUVENTUD.
Según mis familiares, en el pueblo en el que se crió mi madre. Había una fuente a las a fueras que tenía un poder.
Una de las primeras generaciones de mi familia osea hace muchos años cuando se fundó el pueblo. Situaron una fuente para decorar su entrada pero tenía un poder que se había ido observando al cabo de un tiempo. Aquella fuente podía quitar las arrugas, creer psicológica mente que eras más fuerte y más niño. En conclusión, que podías hacer lo que te propusieran.
La gente del pueblo hacia cola para poder coger agua de la fuente, acabaron intercambiado hasta comida para aquella sustancia mágica.
Había una mujer muy rica y no muy mayor que no creía en estas cosas. Estaba muy acomplejada con su edad, se pensaba que tenia menos años de los que tenía y acabo con una gran depresión.
Su nieto viendo este suceso decidió cambiarle el agua de las cenas por esta extraña agua sin que su abuela lo supiera.
Estuvo bebiendo de este agua menos de un mes y ya se veía su resultado.
Daba gracias a Dios creyendo que había sido un milagro pero finamente su nieto le dijo lo que había estado haciendo.
Ésta viendo que no era mentira el dicho de la fuente y que podía hacer cosas realmente imposibles,Fue a medianoche a robar todo el agua de la fuente y meterla en en un barril encondiéndolo en su casa.
Todos lo días bebía y bebía, hasta que esta tacaña mujer se convirtió en una niña de unos 12 años.
Todo el mundo se quedó impactado al ver este suceso ya que nunca había ocurrido ni creían que podía pasar cosa tan semejante.
Al cabo de muchos años decidieron derribar la fuente para que no ocurriese algo así nunca más. Con esta historia podemos llegar a la conclusión que no hay que ser tacaño en la vida y que hay que utilizar las cosas con un límite por muy buenas que sean. Porque todo lo bueno tiene algo malo.
Fuente antes de derribarla